Terminar el curso no fue fácil, y si bien el esfuerzo implicado día tras día, las tardes de estudio en la biblioteca y los últimos resquicios de fuerzas que encontré dentro de mí fueron duros, también merecieron la pena. Que `todo esfuerzo tiene su recompensa´ es algo que aunque no todos hayan tenido la fortuna de comprobar por ellos mismos, si saben la gran verdad que esta frase esconde detrás. A pesar de no saber bien si catalogarlo en virtudes o en defectos, he de admitir que el afán e incluso la obsesión por que mis estudios vayan lo mejor posible en ocasiones me juega malas pasadas de estrés innecesario y agobios constantes, aunque también posee su lado positivo. Terminar el curso orgullosa y satisfecha no es algo fácil, aunque sí muy satisfactorio. Por ello, mirando ahora atrás estos últimos meses, me considero no sólo satisfecha sino también feliz, algo que no todo el mundo siente una vez terminada la faena.
Hablando de virtudes y defectos, uno de estos últimos es mi falta de organización. Aunque si que es cierto que en algunos aspectos soy enfermizamente ordenada (véase mi armario, a pesar de la contraria opinión en ocasiones de mi queridísima madre), si que hay otros aspectos en los que aún debo trabajar. Y en ellos se ha encontrado este año el compaginar estudios y el blog. Produce una gran impotencia y rabia ver cómo no le dedicas tiempo a algo que de verdad disfrutas por falta de organización. Por ello, uno de los propósitos de mi lista para el inicio del siguiente curso, es compaginar estudios con este espacio al que tantas horas me gusta dedicarle. Soy consciente de que 2º de Bachillerato no es un curso facil, si bien el más dificil de todos según la opinión popular, y por ello mismo quiero demostrarme a mi misma que soy capaz de eso y más.
Una vez terminada esta reflexión-explicación, escribo desde prácticamente la otra punta del mundo, un lugar lleno de sueños, magia y energía: California. Me siento afortunada por poder estar aquí, por disfrutar y empaparme de una cultura diferente, por hablar inglés, pasar calor, estar fuera de casa, probar cosas nuevas. Por formarme y formar un pedacito nuevo de mi vida. Hasta ahora no he podido hacer muchas fotos, aunque os traigo un pequeño recopilatorio del reciente fin de semana: el mítico partido de béisbol americano y la escapada al lago Tahoe, donde las casitas de madera, los bosques y el aire era tan diferente al que estamos acostumbrados.
Espero que estéis disfrutando del verano, que descanséis pero al mismo tiempo no perdáis las ganas de aventuras y de descubrir lugares y cosas nuevas. Llenaros de toda la energía posible.
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